jueves, 12 de junio de 2014
Willemstad, un trozo de Holanda en el Caribe
No puede haber mayor contraste de paisajes: la verde y húmeda Holanda de los molinos y los canales contra el luminoso Caribe de playas de arena blanca y aguas cristalinas. Y sin embargo, es posible fundir ambos mundos en uno solo. Para eso tenemos que viajar hasta Willemstad, la capital de la isla de Curazao o Curaçao: un trozo de Holanda en el Caribe.
Esta ciudad fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1997 por su increíble y original estética, única en el mundo. La mayor parte de sus edificios están construidos al estilo neerlandés, sobrio y vertical, con tejados a dos aguas y amplios ventanales. La nota caribeña la ponen sus variados y llamativos colores de las fachadas. El resultado es muy bonito y cautiva a todos los visitantes.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario